No lo digo yo, lo ha dicho un tribunal de California. Los jueces han establecido que los bloggers no tenemos obligación de revelar nuestras fuentes y que podemos acogernos a las leyes que protegen a los periodistas.
En este juicio se enfrentaban Apple y un grupo de bloggers a quien les acusaba de difundir datos internos de la empresa y pedía revelar sus identidades. La Electronic Frontier Foundation y el Centro Stanford de Internet y Sociedad han defendido a los bloggers. En su decisión los jueces señalan que los sitios de Internet deben ser tratados igual que los periódicos, las televisiones y las radios y que los correos electrónicos de los bloggers deberían ser también protegidos, igual que las llamadas telefónicas o los documentos escritos.
Así que ahora cualquiera que acceda a Internet tiene confidencialidad sobre sus fuentes, escriba en su blog, en una página web o en un foro; diga verdades o mentiras. No llego a tener del todo claro esta decisión porque por ejemplo hay muchos contratos que incluyen cláusulas de confidencialidad y esta decisión supondría su anulación. ¿Qué opinas?